miércoles, 10 de junio de 2015

Reforma Laboral: La corrupción de la política y el dinero no la pueden pagar los trabajadores

Declaración de Prensa
Reforma Laboral: La corrupción de la política y el dinero no la pueden pagar los trabajadores
El proyecto de Ley que Moderniza el sistema de relaciones labores, introduciendo  modificaciones  al Código del Trabajo, la llamada Reforma Laboral ingresada por el Gobierno el 29 de diciembre de 2014, es un tremendo retroceso para los trabajadores y perpetúa el régimen de sometimiento del modelo de relaciones laborales impuesto hace 35 años.
La rimbombante reforma laboral presentada por el Gobierno y modificada en cinco oportunidades por la misma Presidenta de la República con la formulación de indicaciones, mientras se encuentra en su primer trámite en la Comisión de Trabajo y Seguridad Social y en Comisión de Hacienda, no resuelve los problemas laborales actuales y favorece a los grandes empresarios y las multinacionales; mineras, eléctricas, sanitarias y retail.
Si la reforma laboral instala “la adaptabilidad laboral en la negociación Colectiva”  terminará por destruir el proceso de negociación Colectiva en la búsqueda de mejores condiciones para los trabajadores como fruto de su trabajo en la empresa.
La adaptabilidad se convertirá en la mejor herramienta para destruir la familia, el descanso, el bienestar en post de trabajar más por un poco de mejor salario. Hoy la jornada se limita en 10 horas y si a esto se agrega las tres horas de traslado hablamos que el trabajador vive en función del trabajo 13 horas del día.
Seguir perpetuando la practica antisindical de extender beneficios sindicales por el empleador para seguir destruyendo el trabajo sindical, es una aberración jurídica legal, que va contra todo principio de la buena fe, pues en los beneficios del contrato colectivo  el titular es el sindicato.
Seguir con la definición de empresa “estratégica” sin huelga para las empresas sanitarias y eléctricas, estando ellas en manos de grandes corporaciones mundiales y privadas, que usufructúan de la pobreza de los bajos ingresos de los chilenos, que empobrecen a sus trabajadores con la subcontratación del 60%  de las actividades del giro, que congelan salarios de sus trabajadores con contratos impuestos bajo el artículo 384 del código, es un privilegio que sólo tienen en Chile, y que se explica por el financiamiento fraudulento de políticos con boletas falsas de servicios que nunca fueron presentados.
 Frente a este escenario político con que se está llevando la reforma, los trabajadores exigimos que la Reforma Laboral sea legislada, modificada y votada por los parlamentarios limpios. Los parlamentarios corrompidos por dineros entregados por grupos económicos y empresas como Aguas Andinas que hayan promovido la entrega de dineros con boletas falsas, deben salir del Congreso y permitir que los cambios que Chile necesita se hagan. ¡No queremos una reforma laboral hechas por políticos corruptos!
Hacemos un llamado a todos los trabajadores de Chile a movilizarse para poner fin a la corrupción, para cambiar el código laboral, poner fin a las AFPs, para exigir la garantía de una salud y educación gratuita y de calidad, una nueva constitución tejida con las manos limpias del pueblo chileno. Recuperando nuestros derechos fundamentales de una vez y por todas.

HUGO MATURANA AGUILAR
PRESIDENTE
FENATRAOS CHILE


Federación Nacional de Trabajadores de Obras Sanitarias de Chile - FENATRAOS CHILE